Doble Limpieza: el arte de limpiar tu piel dos veces

La doble limpieza , o doble limpieza, es para muchos el secreto de una piel sana. Sus orígenes no son muy conocidos, pero se ha convertido en un mandamiento para todo aquel que se preocupa por cuidar su rostro.

Es un método de limpieza de la piel que se debe realizar al final del día, antes de aplicar las cremas que sueles aplicar antes de dormir y que consta de dos pasos de limpieza, uno tras otro. Se rumorea que es solo una forma de hacernos gastar dinero en más productos, ¡pero veamos si podemos convencerla de lo contrario!

La primera limpieza sirve para retirar el maquillaje, el protector solar y la capa de contaminación y suciedad que se acumula durante el día. Los productos utilizados en esta etapa normalmente son bálsamos o aceites , los cuales se deben retirar con una toalla facial húmeda. Sabemos que, químicamente, los aceites se mezclan con los aceites, por lo que tanto los bálsamos como los aceites disolverán sustancias similares, ya sea maquillaje resistente al agua o suciedad producida por la piel.

La segunda fase tiene como objetivo limpiar más profundamente la piel, con el fin de prepararla para recibir las cremas que utilizas antes de ir a dormir (tónico, tratamiento e hidratación). En este paso se suele utilizar formulaciones acuosas como leche, crema o gel , que permiten que el producto penetre más profundamente en la piel. Se deben aplicar masajeando el rostro durante unos minutos y retirar con una toalla facial húmeda.

Si aún tienes dudas sobre si la doble limpieza es para ti, te preguntamos lo siguiente: ¿usas protector solar en tu rutina matutina? Si la respuesta es sí, ¡no puedes prescindir de este método! Independientemente de si estás maquillado o no, el protector solar funciona como un filtro para tu piel, que debes retirar al final del día. Una limpieza simple no te permite limpiar tu rostro correctamente y, en consecuencia, no permite que los productos que utilizas después de la limpieza funcionen de manera óptima (¡piensa en tu producto antiarrugas!). 

Si has pasado el día en casa, sin usar protector solar ni maquillarte, no necesitarás hacer una doble limpieza esa noche.

Por mucho que la pereza intente detenerte, recuerda que la doble limpieza no cuesta tanto… ¡y tu piel te lo agradecerá!